¿De qué va todo esto? ¿Acaso es debido a la situación que estamos atravesando? Y... ¿qué pasará cuando te des cuenta de todo esto?
¿Se supone que estamos destinados a coger más de lo qué damos? ¿o se supone que debemos ser amables? En ese supuesto, supongo entonces que sólo los tontos son amables y es de sabios ser cruel. Esto me lleva a pensar que si la vida pertenece a los fuertes, ¿qué dejarías en una antigua regla de oro?
Y es que, tan cierto como que hay un cielo sobre nosotros, se que hay algo más. Algo incluso que los que no creen pueden sentir. Creo en el amor, y la verdad me he dado cuenta que sin amor verdadero sólo existimos, pero no vivimos. Hasta que encontramos el amor que perdimos, no somos nada. Así que cuando camines, deja que tu corazón siga ese camino y sólo a partir de ese momento podrás encontrar el amor en cualquier lugar.
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