Vengo a decirte lo mismo que tantas veces te he dicho, eso que poco me cuesta y que tu nunca has oído. Pequeño de las dudas infinitas, aquí estaré esperando mientras viva.
Vengo a decirte que el tiempo que ya llevamos perdido es solo un punto pequeño en el cielo del olvido. Que todo el daño que tengo y lo que ya hemos sufrido, tiene que servir de algo para que hayas aprendido que como yo a veces sueños, nadie ha soñado contigo; que como te echo de menos, no hay en el mundo un castigo.
Vengo a decir que lo siento aunque no tenga un motivo, para que cuando estés solo sientas que a tu lado sigo. Para que sientas que tiene siempre a tu lado un amigo. Porque no quiero perderte, ni quiero ser yo el perdido
Pequeño de las dudas infinitas, aquí estaré esperando mientras viva. No dejes que todo esto haya sido en vano porque ahora estés asustado. Tranquilo que la luna no se apaga que su luz siempre nos guarda.