Cuéntame, ¿Por qué sigues así? Se te ve tan triste... Y no me digas que es porque te vas a rendir cuando vuelva a verte y me des la espalda. Sigues escondiéndote de aquellas situaciones y personas a las que no puedes perdonar por lo que te hicieron. Puedes llevar ese peso tu solo sobre tus hombros, pero sabes que esa no es forma de vivir.
Entiendo que es fácil comprar lo que siempre nos han vendido, pero lo cierto es que la mayoría de las veces el sentimiento se ve perdido y abogado al exilio. Por ello siento y creo que hasta el mismo infierno se congelaría en este mundo cada vez más frío. Así que, abre los ojos, levanta los brazos y por instante descansa tus pies cansados, porque estás aquí conmigo y te mantendré a salvo en mis cálidos abrazos.
Por favor, no estés asustado porque no hay motivo para estarlo ni ninguna duda que revolotee por tu mente. Yo seré quien te levante en tus momentos más débiles; arreglaré tu corazón y cuidaré de tus heridas. Haré lo que nunca otro ha hecho jamás por ti. Te lo he dicho no una ni dos veces, sino cientos, y te lo repetiré las veces que haga falta.
De la misma forma que el calor del sol sigue adelante por el frío espacio, o una corriente de agua sigue su curso, mi amor te seguirá. Cuando todo lo demás haya cambiado y no reconozcas lo que te rodea, yo seguiré aquí, inmutable. Y cuando creas que todo tu mundo se ha desmoronado, estaré ahí, a tu lado.
By JM
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