Te detienes a observar qué es lo que has dejado atrás y te das cuenta que esto forma parte del plan. De lo que hagas a partir de este instante, hasta el fin, ya solo depende de ti y de nadie más.
Y ahora llega el juego de la vida y hay que seguir; equivocarse es vivir. Causa, efecto, principio y fin. Recuerda que siempre puedes elegir en qué barco has de subir para no tener que nadar al naufragar.
Y buscarás sin encontrar ayuda porque no hay lugar donde escapar. Donde escapar de este viento que te envuelve; pero quiero que sepas que yo seré el viento y el león al llegar a tú último rincón. Tendré que ser el viento y envolverte. Sin sentir miedo seré el viento. Sin sentir miedo a equivocarme, seré el siroco que nuble tu razón.
Cuando descubras qué has perdido al jugar, y estés sin fuerzas y sin un lugar, tal vez escapar y acudir a este viento que te envuelve te ayudará. Porque yo seré una vez más ese viento y te haré sentir lo mejor que aún te queda por vivir.
By Zhr'
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