Tierno era mi amado de los alrededores de la ciudad y fuimos novios desde la universidad. Él siempre estaba conmigo. Estábamos destinados el uno para el otro, pero algunas cosas simplemente no funcionaron.
Había lágrimas en mis ojos cuando decidió irse ya que incluso teníamos planes de casarnos algún día, pero las promesas se habían roto antes incluso de que fueran formuladas.
Tierno era mi amado ¡Dios! Cómo echo de menos sus abrazos, y me pregunto quién es aquel que ahora le hace sonreír. Recuerdo la forma en la que él se sentía, recuerdo su sabor. Y si pudiera tenerlo ahora entonces vería todo aquello que me trae recuerdos de mi infancia. Él fue mi primer día de verano; sí, ese chico es para mi.
Así que ahora bailo con el corazón hecho pedazos y no hay médico que pueda repararlo de nuevo y me repito a mi mismo que estas son las palabras que nunca volveré a pronunciar. Porque lo di todo hasta rendirme; fui una víctima más del amor fácil por pronunciar aquellas palabras.
Estas son las palabras que le susurro a tu fotografía. Estas son las palabras que pronuncio en sueños. Estas son las palabras que desearía haberte dicho cuando estabas a mi lado
1 comentarios:
Hay personas que poco a poco se hacen un hueco en el corazón y aunque desaparezcan de tu vida, los castillos o mansiones en las que vivieron, aquellos jardines que ahora mustios quedan tras su partida, nunca desaparecen. Y al hacer un recorrido por aquello que fueron tiempos pasados acarician nuestra alma, como si espinas fueran.
Dudamos de quienes somos, pero aunque duela y muramos en el intento..., debemos seguir, en busca de aquello que algún día encontraremos.
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